Desde pequeña era fantástica,
cantaba, bailaba. Así con esas potencialidades innatas actuó, tipo 8 años, en
la Compañía Colorín Colorado de Iván Vera-Pinto. Luego se fue a Estados Unidos
donde su padre biológico. Vuelve a los 16 años y hace teatro conmigo, en la
Compañía Viola Fénix. Cantaba, tocaba guitarra y hablaba inglés perfectamente. Actuó
en nuestro segundo montaje “Barco a Venus” proyecto Fondart año 1995, en cuyo
elenco también estaba su tío Senén y Cynthia. Dedicada, versátil, linda. Yo pensaba
que sería una estrella. Cuando sale del
liceo se va a Santiago, entra a estudiar teatro a la Católica, no termina, pero
filma algunas películas, luego vuelve a Estados Unidos, allí filma muchas otras
más. Fue un orgullo para Iquique, cuidad
donde la nombran Hija Ilustre. Las fotos de las portadas de los diarios, los
reportajes en revistas de papel couché hacían destacar su belleza. A los años
regresa y fue el rostro de unos de las Festivales de Teatro Iquiqueño, UPA al
Teatro 2005. Money como la conocíamos,
era rupturista, audaz. Vivió muchos años a la vuelta de mi casa. Siempre me
visitaba, contaba de sus proyectos, grandes sueños, pero estos se desvanecían.
Estuvo mal, hasta saber del gran impacto que le deparaba la vida. ¿Cómo una
niña tan talentosa con esa terrible enfermedad, siempre se demostraba feliz? Esa
era la espina clavada en su familia y quienes la queríamos. Hasta hoy,
impactado en lo más profundo por lo esperado. Sé que llegaste a ser la estrella
del firmamento. ¡Buen viaje Money!
Guillermo
Ward
Director
Compañía
de Teatro Viola Fénix